Viajar permite huir de la rutina diaria, del miedo al futuro.” Graham Greene

 Siempre he remarcado la importancia del viaje para el cambio de vida.

El viaje interior, y cuando este ya no tiene más recorrido el viaje exterior.

El cambio de vida necesita de escenarios y tiempos diferentes, ya que la rutina, los hábitos, las creencias, los prejuicios y un montón más de factores impiden la transformación, la metamorfosis.

Ese escenario puede ser interior, un nuevo escenario mental, e imprescindible un tiempo nuevo: el presente. Pero cuando este viaje interior no da más de sí, es necesario emprender un viaje exterior, el cual refresca y rejuvenece la mente, y da vigor y rejuvenece el cuerpo.

La aventura de viajar consiste en ser capaz de vivir como un evento extraordinario la vida cotidiana de otras gentes en parajes lejanos a tu hogar.” Javier Reverte.

Pues siendo coherente con mis planteamientos, he iniciado el viaje exterior por escenarios de Próximo y Medio Oriente, en principio con una duración prevista de dos años, después como siempre habrá que ir modificando, ajustando el plan de vida. Como sabéis los que seguís mi blog, el plan de vida es necesario, pero imprescindible una actitud de flexibilidad y apertura para cambiarlo cuando ya ha caducado.

Os iré contando mis cuitas y los entresijos de ese cambio de vida, de esa transformación, de esa esperada y deseada metamorfosis.

 

Uno cree que va a hacer un viaje, pero enseguida es el viaje el que lo hace a él.”  Nicolás Bouvier

Nos vemos en el camino de la vida.

Acepta  la necesidad de un viaje para un cambio de vida.